nace el 8 de febrero de 1950 en la
populosa barriada de "El Empedrao"
-parroquia Santa Lucía- de la ciudad
de Maracaibo, estado Zulia. Pronto
se reveló como un niño prodigio,
llegando a interpretar virtuosamente
varios de los instrumentos típicos
de la música zuliana: cuatro, furro,
tambora, charrasca y maracas. En
1962, con sólo 12 años de edad,
incursiona en el mundo artístico con
una agrupación gaitera infantil
llamada “Los Invasores”. Para
entonces ya había compuesto una
pieza (“Zulia”), la cual llegó a
presentar en el entonces canal 13 de
la televisión regional.
En 1964 se
traslada a vivir al estado Mérida,
donde funda las agrupaciones “Los
Bomberos”, nombre inspirado en la
profesión que desempeñaba en aquel
momento, y luego “Los Canarios”. En
aquella época viajaba a Maracaibo
con cierta regularidad por motivos
familiares y durante sus visitas a
dicha ciudad, se reunía a ensayar
con un conjunto gaitero llamado “Los
Tigres”. En 1968 regresa a vivir a
Maracaibo de manera permanente y es
llamado por el conjunto “Estampas
Gaiteras”, con quienes grabó la
canción “Los Parranderos”, original
de Gil Ferrer.
Su estilo lírico
le va haciendo ganar prestigio
dentro del ámbito artístico, por lo
cual es invitado a integrar el
conjunto "Santanita" en 1971, donde
ya participaban indiscutibles
figuras del género, entre ellas
Gladys Vera, Cheo Beceira y Danelo
Badell. Sin embargo, es en 1974
cuando definitivamente se consolida
como una leyenda gaitera, al unirse
a una de las más prestigiosas
agrupaciones gaiteras zulianas:
“Cardenales del Éxito”. Allí
compartió escena con otras leyendas
de la gaita zuliana, como Douglas
Soto, Pedro Suárez, Renato Aguirre
González, Simón García y Ricardo
Cepeda. Junto a ellos permanecería
hasta 1979. De esa época datan
legendarias composiciones suyas como
“Negra Cumbá, Cumbá” y “La
Barloventeña”.
En 1980, ya
consagrado, ingresa a “La
Universidad de la Gaita”. En 1983
entra -ya en calidad de director
musical- a la alineación de
“Gaiteros de Pillopo”, conjunto con
el que se da a conocer en toda
Venezuela y con quienes llega a
grabar sus más conocidas y
recordadas composiciones, como: “El
Barbero”, “Entre Palos y Alegrías”,
“Morrocoy”, “La Piñata” y “La
Taguara de Bartolo”. En 1986 regresa
triunfalmente a “Cardenales del
Éxito” como cantante y director
musical y nuevamente cosechó éxitos
como “El Burro” y “La Comae”.
En 1992 decide
fundar, junto a los músicos Pedro
Villalobos y Daniel Méndez el
conjunto “La Parranda Gaitera”;
agrupación con la que también
cosechó éxitos como “La Florecita”.
Paralelamente trabajó de manera muy
prolífica como compositor y
arreglista para otros conjuntos
gaiteros con canciones que también
han permanecido en la memoria
popular, como “La Negra Cocoa Coa”,
“Estampas”, “El Mercado de los
Buchones”, “Sabor Añejo”, “El
Marciano”, “Ay Corazón”, “Bahía de
Cata”, “Dr. Caldera”, “Patrimonio
Musical” y ”En Casa se Larga el
Forro”.
Fue, asimismo,
director y fundador de los conjuntos
“Maragaita” y “Estrellas del 2000”.
Su última grabación (“Tu Ave
Cantora”, con el conjunto “Los
Chiquinquireños”), es una oración a
la Virgen de Chiquinquirá, pieza
compuesta originalmente para ser
cantada por Betulio Medina, la cual
dejó grabada en maqueta momentos
antes de su fallecimiento. Sin
embargo, la calidad tan perfecta de
la grabación permitió luego la
edición de una copia dejando su voz
original para deleite de los
coleccionistas y amantes de la
gaita.
A lo largo de su
carrera artística, fue galardonado
con varios reconocimientos como el
premio “Virgilio Carruyo” y “Una
Gaita Para el Zulia” de Industrias
Pampero, en su primera edición. En
1999 fue galardonado como solista
del año. Fue además locutor del
programa radial La Gaita Antañona
transmitido de lunes a viernes a las
12:30 por la emisora Zuliana 102.1
FM.